lunes, junio 04, 2007

no está (ni se le espera)

Se cansó de futuros inciertos,
de inventarse el calor de otros cuerpos
en su colchón,
camino del centro
metió en la maleta
el corazón,
las paredes me cuentan
que hay cuadros que pintan mejor.

Un número falso
le dejó la suerte en recepción,
dicen en la radio
que las puertas de otro corazón
son un cementerio
lleno de valientes,
y, mira por donde,
hoy se siente prudente...

Se cruzó de brazos,
y al intentar la conversación
cartel de cerrado,
y esta tampoco es la dirección,
un silencio largo
...
...
y vuelve a sonar vuestra canción...

la esperanza no está
ni se le espera,
ya no hay quien le ponga una vela
al milagro de tus mantas...
la esperanza no está
ni se le espera,
ya no hay quien le ponga una vela
a tus madrugadas...


Esta es la historia de algo que no llegó
por su cobardía,
por la tontería de los dos,
no cerró la puerta
y le fue siguiendo el desamor,
y ahora en su cabeza
otra vez la maldita canción.

Se metió en el metro
entre Fuencarral y Campoamor,
después de un concierto
no supieron ni decirse adios

y el vagón vacío
sólo le recuerda
que el pasado
es un libro cerrado,
y el futuro ya no es lo que era...


la esperanza no está
ni se le espera,
ya no hay quien le ponga una vela
al milagro de tus mantas...
la esperanza no está
ni se le espera,
ya no hay quien le ponga una vela
a tus madrugadas...




Demasiado pensar, demasiado creer que vas a fastidiarlo todo, que demasiadas cosas dependen de lo que tú puedas o no puedas hacer. Al final se trata sólo de atreverse a tomar lo que tienes delante. Pero como vives en tu puto mundo de haz-lo-que-debas-hacer, al final te quedarás sin vida y sin nada. Por cobarde.Y por gilipollas.Ahora sí, canciones te van a salir todas las que quieras...

sí, ya me he quedao a gusto...

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